¡Ay que nubes! Estuvimos sufriendo hasta la hora de la ceremonia. Ufff, ¡que nervios pasamos! Al final salió el sol y todo salió a la perfección.
La boda se celebró en el Mas d’Osor (Viladrau), en un entorno fantástico y con música en directo. ¡Hasta Jordi cantó!